Si sos un amante del vino y querés algo nuevo, ¡tenés que probar los vinos bonaerenses! Gracias a la derogación de leyes restrictivas en los años 90, la provincia de Buenos Aires ha comenzado a recuperar su tradición vitivinícola y ahora compite con los vinos de Cuyo. te recomendamos el Insólito Pinot Noir de Puerta del Abra y el Albariño de Costa & Pampa como dos etiquetas que no podés perderte. También los espumantes Prima Prova de la bodega Castel Conegliano en Batán, que se elaboran con uvas italianas Glera y Moscato Giallo.
Si querés hacer enoturismo sin viajar demasiado, la Bodega Gamboa en Campana es una gran opción para visitar los viñedos y probar su primera añada de Malbec, Pinot Noir y Cabernet Franc. También podés probar los tintos, blancos y naranjos de Martín Abenel, de Punta Alta, que se elaboran en el garage de su casa con uvas de productores cercanos y ya llegaron a las cartas de restaurantes y bares porteños. Los vinos bonaerenses están encontrando su propia identidad después de haber sido prohibidos en el siglo XX, ¡así que no te quedes afuera de esta tendencia!
Bruno Wexler